MAGLUMI TOXO IgM (CLIA)
El kit ha sido diseñado para la determinación cualitativa de Toxo IgM en suero humano.
Descripción
La toxoplasmosis es una enfermedad infecciosa bastante extendida causada por un parásito protozoario intracelular, llamado Toxoplasma gondii.
Si la infección ocurre en mujeres embarazadas, la toxoplasmosis puede causar una amenaza para el feto con posible aborto espontáneo, prematuridad o muerte fetal, ya que el patógeno puede transmitirse al feto a través de la placenta. El feto cuya madre está expuesta a la infección por Toxoplasma durante el primer trimestre del embarazo desarrolla lesiones graves en el sistema nervioso central que generalmente conducen a la muerte fetal. La infección por toxoplasma adquirida durante el segundo trimestre puede causar hidrocefalia, retraso mental y psicomotor, ceguera y calcificaciones cerebrales. Sin embargo, la infección por toxoplasma es más común durante el tercer trimestre y causa retinocoroiditis y otras lesiones oculares, lesiones en el sistema nervioso central e infección asintomática latente que eventualmente puede convertirse en una enfermedad completa. Los anticuerpos IgM específicos contra Toxoplasma se desarrollan de dos a cuatro semanas después del inicio de los signos clínicos y luego disminuyen gradualmente, desapareciendo en tres a nueve meses. Por lo tanto, la presencia de IgM e IgA en ausencia de IgG o en presencia de niveles bajos de IgG es una fuerte evidencia de toxoplasmosis aguda. Por el contrario, la presencia de IgM en presencia de niveles de IgG decrecientes o constantes indica una infección subaguda.
El diagnóstico diferencial de la toxoplasmosis aguda posibilitado por el ensayo de IgM específica permite un tratamiento adecuado que reduce los riesgos de la enfermedad tanto en pacientes inmunocomprometidos como en mujeres embarazadas.
Los anticuerpos IgG específicos contra Toxoplasma aumentan gradualmente y alcanzan su punto máximo de dos a cinco meses después del inicio de los signos clínicos. Por tanto, la presencia de IgG es útil para distinguir a los sujetos que han adquirido la enfermedad de los que no. Esto es particularmente importante para adoptar una profilaxis adecuada en mujeres susceptibles en edad fértil.
